Feliz Lunes

Muy buenos días, es lunes y la cueva de Candamo descansa ya de tanto blablabla y de tanto jijijiji y de tantas miradas de asombro y de tanto entrar y salir de los de fuera y de los de dentro; y de la guarda guía, qué pesada la tía! Descansa Pachamama. Nosotros seguimos con lo nuestro que nunca deja de ser chocante, burlesco, trágico, cómico, rayando el absurdo. Es que, es salir del inframundo y encontrarme con que, lo que yo pensaba que era imposible de retorcer,  está hecho un nudo marinero. Decirme vosotros si miento: A ver, qué coño hacen el Putin y el gordito norcoreano del brazo Rusia parriba, Rusia pabajo, parando en cada fábrica de armas pa sacarse la churra y enseñársela mutuamente? Quién dejó que estos dos tarados pusieran sus perfiles en Tinder? No respiro desde qué los vi en una postal de San Valentín con purpurina y corazones rojos (ay, no! Corazones, no, que no tienen!) Con purpurina y escrotos titilantes. 
Quién consintió qué Pedro Sánchez saliera de orujos por ahí y terminase mandando mensajes de amor a Puigdemont con Amnistías de colores? Y, ahora, la despechada, diciendo qué él pone las condiciones pa volver!!! Qué alguien se encargue de quitar los móviles a cierta hora de la noche a las personas con cierta responsabilidad, por lo que más queráis! 
Quién dejó a Felipe González salir de cena con la derecha andaluza y a Nicolás Redondo con Aznar y Leguina, la noche después de la noche de orujos de Sánchez, cuando en el after le dió por expulsar del PSOE al hijo del sindicalista de la huelga general qué más le gusta rememorar a González? 
Porqué le están haciendo esto a Feijoo? Lo de presentarlo como posible presidente, digo; qué no quiere! QUE NO QUIERE, COÑO YA!! No veis que, si no dejáis de amenazarle con esa sesión de investidura, va a terminar yendo él a buscar a Puchi pa que gobierne con Sánchez al precio que sea, qué lo paga él de su bolsillo? Parar ya con esto!
Quién autorizó a Cristine Lagarde a aumentar la dosis de laca ultrafijadora para rubias empoderadas, qué fue respirar profundo después de la segunda vaporización y subirnos los tipos de interés como si la inflación fuera un cuento chino (qué lo es! Qué lo es!). 
Yo, señores, creo que no debo ausentarme tanto tiempo del mundo a ras de suelo, porque cuando emerjo, a mi todo esto me da un vértigo que me mata. 
Pero, ya tenía ganas de venir a revolver un poquito, eso sí que es verdad. Feliz lunes. Corriendo pal bus. 


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