La Sencillez

Muy buenos días. Es viernes y hace frío. No llueve, eso es cierto; pero, el frío corta como un bisturí. Nada de tonterías: blindarse qué a ver si nos va a entrar un enfrentamiento general y acabamos el finde en la cama,  sin vermutes ni vinoteos. La qué es fría como un témpano de hielo es la rubia del BCE,  la Cris Lagarde. Acaba de avisar a quién la quiera escuchar, qué se acabaron las ayudas por la crisis energética, qué ya pasó Navidad y recuerda a todos aquellos que quieran encender el horno mientras pasan el aspirador , qué los hombres de las cavernas asaban los ciervos en hogueras encendidas con dos piedras, qué les servían para calentarse y, con un manojo de mijo, barrian la cueva que daba gloria mirar pa ella. Así que, si tenéis frío, dos piedras.
Me preocupa enormemente un rumor que saltó está semana sobre un posible embarazo de Tamara Preysler. Alguien sabe algo? Me quita el sueño, os lo digo de verdad. Por su parte, Tito Mario anda hablando de lo incómodo qué se estuvo en villa meona. Chico, no sé qué decirte; y todos estos años ahí metido tan mal a gusto, eran una promesa a la virgen de Fátima o la Preysler lleva de segundo Misery?
En medio de guerras frías y guerras calientes, en medio de exhibiciones de altas y bajas tecnologías armamentísticas, sobrevuelan el cielo americano dos globos aerostáticos qué, parecen ser espías chinos. Al final, ni drones ni dronas, en la sencillez siempre estuvo el buen gusto, qué diría mi adorada Nati Abascal(discreta ella, dónde las hubiere)
Y, en mi querida Asturias patria/balcón/árbol/flor, se ha vuelto a desatar la polémica sobre la romanización (o, no) de la ciudad de Gijón. Y ahora estaréis pensando que es un tema aburrido y qué lo pongo aquí para rellenar el último párrafo del Sanviernes. Craso error. Retomamos una de las más escabrosas historias con arqueólogos, políticos, pila de millones invertidos, plumas afiladas y hostias en callejones oscuros. Es apta para todos los públicos (incluso los profanos se verán enganchados) qué se podrá disfrutar en los periódicos de tirada provincial. Apasionante como pocas, os recomiendo seguirla sin perder detalle. Yo, después de un par de temporadas vistas y revistas, voy con los divergentes, of course.  Y, vamos a tener que rematar faena y volver a hacer acopio de combustibles porque el frío no se va. Los mejores y más baratos, los que salen del hígado. No os perdáis ningún informativo y veréis qué sudores con lo del empleo qué nunca estuvo mejor aunque el paro haya subido como las espuma.
Feliz finde. 

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