Vinted

Buenos días. Es lunes, llueve y hay 12 graditos ahora mismo; pero es de día!!!A las seis y media de la tarde, cuando caiga Mordor sobre Asturias, me cagaré en la puta hora; pero, en estos momentos, os perdono todo a todos. Por otro lado, no sé si declararme en puente de forma unilateral y volver a la cama de la que nunca debí haber salido. En fin... Recapitulemos:

El viernes nos fuimos a trabajar con el corazón al borde de la taquicardia ventricular, después de ver el modelito de la reina en el evento de las cantoras y bailaoras premiadas y haciendo rogativas a la Balesquida para que le insuflase inspiración en el oufit de la ceremonia de entrega de los premios.  Pués, la Balesquida cumplió y todos respiramos tranquilos cuando salió del Reconquista  hacia el Campoamor con un precioso Carolina Herrera, en blanco y negro, qué según el HOLA, ya lo lució Sassa de Osma y qué habría pagado por él, en su momento, más de siete mil euros. La sensación qué transmite la Biblia del glamour, en su afán por destacar las virtudes de austeridad y mesura de nuestra reina, hacen que mi neurona discapacitada vaya cantando "lo compró en Vinted! Lo compró en Vinted!". Como sea, iba monísima, monísima. Nada de espaldas tonificadas y lubricadas, qué ya es. Hablemos de espaldas: sólo yo me di cuenta del fallo de coordinación qué hizo que la familia real desfilará entre el patio de butacas mientras el Campoamor en pie aplaudía a Doña Sofía y, la mitad de los asistentes les daban la espalda? Algunos se volvieron y, al ver a los protagonistas del acto detrás suyo, se giraron sin dejar de aplaudir; otros, ni se percataron y siguieron mirando al palco de platea y algunos otros iban girándose 360° y aplaudiendo aquí y allá. Terribles dos minutos. Terribles.

 Las nenas, fatal. La princesa Leonor, de Zara home, de mantel antimancha de la colección "Jungla negra". Y Sofia, envuelta en drapeados propios de señora entrada en carnes y en años. Luego vinieron los discursos, las letras, las gastroenteritis y todo eso. Pa mi, qué fue todo culpa de los modelos de las rapacinas. Vaya, qué quedan convocados los Premios Princesa de Asturias 2023 y qué Dios reparta suerte. 

Cambio de tercio. No es por presumir ni nada de eso. Pero sólo comentaros que Puchi se niega a la reforma legal del delito de sedición. Ahí lo dejo. 

Luego está lo de ese proyecto bajo el mar para llevar gas y petróleo al otro lado de los Pirineos. Se llama BarMar. Bueno, lo qué me dió de sí el nombrecito toda la noche... empecé a evocar un pub en medio de un banco de coral, sólo para buzos y la pandilla del Bob Esponja. Luego, al pronunciarlo, me salía barman en boca de murciano. Luego me vino a la mente el nombre de una marisquería. Mira, qué risa pude pasar!! Casi tanto como cuando leí el artículo del HOLA sobre el vestido de Letizia. Casi pude ver los cercos en las axilas, del desodorante de Sassa de Osma. Qué será un Loewe, no me cabe duda! Feliz lunes y feliz cumpleaños, mi amado Diego. Donde quiera qué estés.