Viernes, viernes.

Muy buenos días. No consigo centrar el horario; pero, una cosa es segura: hoy es viernes, incluso para mí.
El panorama de pactos y refritos está en su momento más intenso, con los minutos corriendo como demonios y el tic-tac de banda sonora.
Matiza Macrón desde la France a Rivera y le advierte de que si sigue empeñado en escorar hacia la derecha voxiana, qué  vaya olvidándose del apoyo europeo. Y es que, más allá del Negrón la sidra estropéase y, más allá de los Pirineos, la mayonesa se corta. Qué sabrá Macrón de negociar con Lucifer, si la ocasión lo requiere, o con Santiago Abascal, si hablamos de puntos claves en el insondable mundo de las autonomías??
El que me mantiene las patas de gallo a salvo, gracias a que cada todas sus noticias me abren los ojos como platos, es mi Donald querido. Es tan apasionado... Resulta que  por culpa de lo de Crimea y Rusia y Ucrania, tiene el Pentágono desplazados unos 4000 soldados americanos; pareciéndole pocos, envía otros mil (qué yo no sé dónde van a meter tanto marine!) Y, cómo lo uno trae lo otro, quiere hacer una base militar y llamarla Fort Trump. Dime si no ye pa comélu con trapos y todo! Claro, estoy pensando que Fort Apache, no encaja en lo de su política migratoria y mejor dejar el sello y la impronta de cada uno. O qué?
Este Donald mio, qué no da parada en todo el día, está empeñado en que los iraníes han bombardeado unos petroleros estadounidenses; pero, la tripulación solo acierta a decir que vieron unos objetos voladores. Y no os riáis porque ya hace un tiempo que , con lo de los satélites y toda esa basura espacial, los aliens deben estar empezando a amoriar y tal. A mí, no me extraña nada que estén escupiendo cosas desde arriba. Jartura, se llama. No lo abducirán una temporada?
Los de ALCOA van camino de Madrid a preguntar "por lo suyo". Qué Dios los proteja durante el trayecto y en el despacho de turno. Mil familias penden de un ERE en Arcelor. Si alguien no ve nubes tóxicas sobre Asturias, que nos ilumine porque yo lo veo muy negro. Lo más oscuro de todo es que nadie nos da respuesta y las miradas incómodas de ministros y consejeros van a dar en el suelo. No me gusta.
Lo que me encanta es el concierto que unos cuantos buenos amigos vamos a ofrecer mañana en La Iglesia de Los Dominicos de Oviedo, con el fin de recaudar fondos para investigar qué coño hacían los romanos en Las Regueras, con todo ese tinglado de Termas, villas, caminos, canales y puertos.... Colaborad! Cada euro, puede salvar una tesela de ese Mosaico qué, entre todos, debemos sacar a la luz!!