TFG Y MÁSTER "Bodas y saraos"

Salto a la superficie desde la mañana del 27 de Junio de 2019 en el que entré en el HOLA N° 3909. La luz me molesta y mis ojos , acostumbrados a los fucsia, coral, azul Klein y verde agua de gasas y tocados, contraen las pupilas intentando adaptarse a este mundo tan real y tan paliducho. Asumo las consecuencias estoicamente porque la crónica de la semana más nupcial y más glamurosa del año no se puede confeccionar sin una labor de espeología nivel "Viaje al Centro de la tierra".
Empiezo con la Esteban que es la que más ocupa, en todos los sentidos: Tres cuartas partes de la portada de la biblia del cotilleo,  las llena un vestido línea "horror vacui" y una princesa del pueblo y para el pueblo desplegando con orgullo toda la paleta de maquillaje de la señorita Pepis y la colección de joyas de la Barbie Reina de las hadas. Para empezar, os diré que todos mis miedos resultaron infundados y el traje de Belén Esteban, superó mis más optimistas expectativas. Pues no me quitó a mi el sueño ni nada,  la posibilidad de que Nati Abascal ejerciera de jefa de estilismo y me la vistiera de Azucena Bedia Atellier de arriba abajo!. Lo que os digo, flores, diamantes, tules, circonitas, transparencias, encajes, miriñaques y mucho "flú-flú" y mucho "crúj-crúj". Lo más guapo del mundo ye, sin ningún género de duda, salir de casa contenta con una misma y, Belén Esteban, el día de su boda salió que no cabía por las puertas (otra vez, en todos los sentidos); fue a la peluquería y pidió el moño más alto y más currao y con un postizo y unos pelos sueltos y dos niveles de volumen. "Y no se te ocurra maquillarme discreta que con lo que te voy a pagar no quiero que quede ni una miaja de Margaretastor, en el bote" y el resultado fue el esperado: la novia más choni y más feliz del mundo mundial, vestida de la novia más choni y más feliz del mundo mundial. Sin disfraces ni postureo. La Esteban en estado puro y el que diga lo contrario, miente como un perro. Ni una foto del Migue, ni de la rapacina. Una con su madre (por cierto, qué mujer tan guapa) y ni una con la familia que no fuera la que comparte con ella, jaula en el zoo Deluxe.  Ahora bien, como te digo lo uno, te digo lo otro: ese detalle de las "ausencias" en el reportaje, es de lo más elegante qué me echado a la cara en estos cuatro largos días de  estudio y meditación.
En el tercio de portada que la "bodísima" deja sin ocupar, se aprietan Ainoha Arteta y María Pombo con sus cónyuges respectivos y recién estrenados que sí quisieron su minuto de gloria. Cómo la Pombo llevaba un vestido más tubo y con su boda, siempre según el HOLA, provocó una cumbre de "influencers", acabó desplazando y pisando la cabeza de Ainhoa y su bello marino. Para el que no esté versado en el mundo laboral, le diré que los influencer, son niñas y niños que enseñan a muchos niños y niñas a maquillarse, peinarse, vestirse... Van de compras grabándose a sí mismos, en los probadores de Zara con multitud de modelitos que te enseñan a combinar; suelen tener unos cuerpos estupendos, gracias a las saludables comidas que te enseñan a cocinar, sin apenas ensuciar la cocina porque no hay nada más sano que una manzana y unas hojas de lechuga; peeeeeeero, si tienes mono de proteínas y por evitar un brote de ansiedad te diera por abrir una pequeña lata de bonito envasado al natural (Ni se te ocurra pronunciar la palabra "aceite" por muy "De Oliva y Virgen" que se apellide), te guiarán magistralmente para convertir el envase de la conserva en un precioso y ecológico portavelas. Esos son los influencers. Si alguien quiere aportar alguna otra definición o dato que me haya pasado por alto, que lo haga sin rubor. Bueno, pues eso, que la Pombo se casó con un vestido muy blanco y muy lápiz que se ajustaba a su estilizada figura como un bañador. Tal cual. Yo tuve un bañador con ese agujero en la espalda sólo que en azul y con lunares. Lo sobrio del vestido lo compensó con creces el sobretodo, con el que cubrió sus hombros y espalda durante la ceremonia religiosa, y que arrastraba metro y pico por el suelo consiguiendo el efecto cola. Esta mezcla abriguito-salto de cama, estaba confeccionado con encajes varios enriquecidos con incrustaciones en cristal, perlitas y pailletes. Se recogió la melena en una trenza de cuatro cabos y esta, iba engomada tres veces (arreglá pero informal). Claro, al ser influencer, te haces tú lo del peinado y el pote y eso que te ahorras en la peluquería, lo inviertes en los trajes de las damitas de honor a las que vistieron de tirolesas, las cubrieron con capas y capotas y, el día más caluroso de Junio, les calzaron unas Hunter. A ver, pa los mundanos: son katiuskas pijas y, por ende, caras. Hay quien dice que, al casarse en Cantabria, le tuvo miedo al clima y ya decía mi abuela que por los pies se coje de todo y quiso evitarles un catarro a las criaturas. Eso es absolutamente falso. Las niñas de las arras, son sus primas y está introduciéndolas en el maravilloso mundo de "la Influencia" y, para ello, no hay mejor camino que el de marcar tendencia. Qué están cayendo treinta y cinco grados como puñales, a las cinco de la tarde y los piesinos os hacen chof-chof dentro de las botas de plástico? pues os jodeis y os aguantáis, que la vida de una influencer es así de dura y cuánto primero os adaptéis, mucho mejor. Y, cómo se os ocurra llorar por amenaza de gangrena, no os dejaré jugar con las cápsulas vacías de mi sérum vital, en la puta vida. Me estáis haciendo decir tacos, joder! digo, CARAMBA!!
La boda de Ainhoa Arteta, fue mucho más seria. Claro, estamos hablando de una Señora que lo del amor y tal, como que le mola mucho; tanto, que se empeña en oficializar el asunto cada vez que cambia de chico y, eso, quieras que no, te da unas tablas que, porque lo tuyo ye el
Bel Canto, que si no, te lo haces de wendding planner (que es una persona con mucho carácter y muy marimandona con dotes militares pa reunir a los invitados de las bodas, meterlos en la iglesia antes de que llegue la novia, colocarlos pa la foto, mirar de lao al que se desabroche la americana antes que el novio y con licencia para extraer, con la cucharilla del café, el contenido de las bolsas testiculares del primero que se anude la corbata en la cabeza. Bueno, a lo que vamos: Lució un vestido sobrio de líneas,  con capa en vez de mangas y un estampado marmorizado en dorado que cedía todo el protagonismo a su marido (seguramente estará todavía tragando sapos por ello). Él tiene una planta... y unos ojos... y ese uniforme que le queda en esa planta... y habla como Lope de Vega y dice unas cosas..."No es mi primer matrimonio, pero sé que será el último"... Las hay con suerte, chica! Ella lució tres vestidos distintos, durante los dos días que duraron los fastos, y no sabría deciros cual me gusta menos. Pero, se lo perdono todo porque ese marido no te lo encuentras en el Primark.
Además de bodorrios, hay un reportaje dedicado a las carreras de Ascot, con fotos de la reina Isabel que se está encogiendo la prubitina mía como una pasa de Corinto y que luce un sombrero cargado de flores que van desde el azul pálido de su traje al morado cardenal maravilloso (qué estoy pensando que, igual no es "encogimiento", sino "aplastamiento" debajo siempre de esas flores y lazadas en los sombreros) Va acompañada por la familia Royal inglish y por la más simpática de todas las parejas europeas coronadas : Máxima y Guillermo de Holanda. Últimamente están en todas partes. Ella, cambió la corona por una pamela cuajada de unas flores como si fueran hortensias gigantes en el mismo tono marrón que su precioso vestido y salió Ascot alante, charlando con la venerada anciana que iba muerta de risión con las babayadas que le iba contando. Qué buen rollo transmite la argentina!! Y lo dejo aquí, que se yo, que me acabo perdiendo entre comparativas inoportunas. Sara Ferguson se fue del brazo de sus hermanas, a la boda de su hermanastro en la campiña inglesa y aparecen mexiadas de la risa con alegres vestidos estampados y alpargatas de cuña. Cuidadín que los espartos lo van a petar este verano!!
Victoria Federica arropa a su cerdito vietnamita con la bandera de España que cualquier adolescente lleva en su riñonera boho-chic, por si tú cerdo tiene frío, y la princesa de Asturias, su madre y la hermana pequeña, asisten a actos muy serios vestidas por un enemigo que les encalama cuarenta años encima a las nenas y le quita veinte a su madre, con un precioso vestido azulín pálido.
Por haber, hay mucho más dentro de la revista. El tema "invitados", casi requiere una crónica personalizada para cada uno de ellos; pero, vamos, que todavía estoy con la digestión de las estrellas de la corona de Belén, cómo pa meterme en más profundidades!!!!
Feliz verano a todos. Me reservo el derecho a publicar de vez en cuando, pero, hoy empieza la jornada estival y voy a relajar un poco. En Septiembre, volvemos a la rutina. Sonreíd todo el rato, estáis tan ideales.....